Tónicos: Es un paso fundamental en el ritual coreano que va inmediatamente después de la limpieza. Su función es balancear el pH y también entregar un primer paso de hidratación a nuestra piel, luego de la limpieza o exfoliación.
Podemos utilizar varios y en diferentes capas a la vez. Con ello, nuestro rostro queda listo y preparado para recibir todos los nutrientes que vendrán en los siguientes pasos.